La Comunidad Valenciana quiere declarar Bien de Interés Cultural cualquier manifestación taurina, tanto festejos en plaza como de calle. Y a tal efecto, ayer el conseller de Gobernación, Serafín Castellano, se reunió con la consellera de Cultura y Deporte, Trini Miró, para entregarle un informe sobre el arraigo de los festejos tradicionales taurinos en la Comunitat y las corridas de toros e iniciar la tramitación de su declaración de Bien de Interés Cultural.
A la reunión asistiieron también el secretario autonómico de Gobernación, Luis Ibáñez, la directora general de Patrimonio Cultural Valenciano, Paz Olmos, el presidente de la Asociación en defensa de las tradiciones dels bous la carrer, Juan Carlos Paricio, y el presidente de la Federación de peñas de bous al carrer de la Comunitat, Manuel Vicent.
Hay que recordar que la Comunitat Valenciana es, en el conjunto de España, la autonomía que mayor número de festejos taurinos tradicionales celebra en su calendario de fiestas, con una media anual de 2.584 días de festejos, según datos del Ministerio del Interior. En concreto, tal y como se ha recogido en la documentación entregada a la Conselleria de Cultura, en la Comunitat tiene lugar algún festejo taurino 7 de cada 10 días del año, y entre julio y septiembre todos los días, sin excepción, en algún municipio valenciano se celebra algún espectáculo taurino. Tampoco es de despreciar otro dato: los espectáculos taurinos y los festejos de ‘bous al carrer’ generan al año en la Comunitat un impacto económico de 184 millones de euros.
Castellano ha indicado que, por ello, queda totalmente demostrada la existencia del factor arraigo y el carácter tradicional de estos eventos, a lo que hay que añadirle el impacto económico que genera todo este sector. “No hay que perder de vista –ha explicado el conseller de Gobernación- que la Fiesta de los toros no se circunscribe al festejo o al espectáculo tal cual, sino que detrás de los mismos nos encontramos un número ingente de personas que viven por, para y de los toros, constituyendo por sí mismos un sector económico con consecuencias laborales, empresariales y fiscales”.