Sudán realizará un despliegue de 15.000 policías que se encargarán de la seguridad relacionada con el partido entre Egipto y Argelia de desempate de cara a la clasificación para el Mundial de Sudáfrica 2010.
El partido que enfrentó a ambas selecciones, y que ganó Egipto por 2-0 forzando el desempate en terreno neutral, estuvo marcado por el ataque de egipcios sobre el autobús de Argelia en el que varios jugadores sufrieron cortes tras la pedradas recibidas en las lunes del vehículo.
La disputa no parece frenarse y por tanto la FIFA hizo un llamamiento a la calma, mientras que la Asociación de Fútbol de Egipto dijo que el incidente del jueves fue organizado por los argelinos.
El gobernador de Jartum Abdelrahman al-Khidr anunció grandes medidas de seguridad. "Hemos completado todos los preparativos y están listos para cualquier emergencia".
Está previsto que hasta Sudán lleguen 48 aviones llenos de aficionados argelinos y 18 de Egipto, con otros 2.000 egipcios que llegarán en autobús. Cada equipo tendría 9.000 entradas, con otras 17.000 reservadas para Sudán, en donde hay una gran colonia de egipcios.