Los hermanos sean unidos, rezaba un fragmento del Martín Fierro, de José Hernández. Esa parte de la obra literaria, considerada ejemplar del género gauchesco en Argentina, se adapta a la perfección en el último fichaje oficial de la Roma. Es que el conjunto italiano acaba de anunciar la incorporación del defensa central Guillermo Burdisso, procedente del Rosario Central. Así, el argentino jugará con su hermano Nicolás, al menos durante la siguiente temporada, siempre y cuando este último solucione su situación con el Inter.
El menor de los Burdisso, de 22 años, llega a Italia a préstamo por un año a cambio de 500 mil euros, estableciéndose en el contrato una una opción de compra por 4.700.000. El precio del futbolista ha disminuido notoriamente si se tiene en cuenta que el club rosarino ha descendido a la segunda categoría de la liga de aquel país, otro de los motivos por los que la necesidad de vender era imperiosa.
Guillermo Burdisso comenzó su carrera como profesional a principios de 2009, y rápidamente se erigió como una pieza clave en la defensa del Rosario Central central junto a Diego Braghieri. Ahora le llega el turno de compartir equipo con Nicolás, quien llegó a la Roma prodcedente del Inter la pasada temporada también en calidad de cedido, y cuya compra aún no se cerró. Entre otras cosas, habrá que esperar qué quiere Rafa Benítez para su nuevo equipo. Ahora mismo, los hermanos sean unidos...