Tras cerrar una temporada cargada de sinsabores, el AC Milan ha comenzado un proceso de renovación que afecta tanto al banquillo como a la composición de su avejentada plantilla.
De momento, la directiva rossonera ha otorgado las riendas del vestuario al preparador italiano Massimiliano Allegri y ahora se centra en la búsqueda de futbolistas que puedan dar un nuevo impulso al decadente juego que ha mostrado el equipo en los últimos tiempos.
Al margen de los grandes nombres que figuran en su agenda (Lukas Podolski o Zlatan Ibrahimovic), el cuadro transalpino también valora la opción de incorporar a jugadores de un perfil más modesto, pero con un amplio margen de progresión.
En este capítulo se englobaría a los que son, según Tuttosport, los dos últimos objetivos milanistas: el centrocampista argentino Lucas Biglia (24 años) y el delantero belga Romelu Lukaku (17 años). Ambos son ya parte de la columna vertebral del Anderlecht, pero aún deben mostrar que su talento puede triunfar lejos de la modesta liga belga .