Por encima de lecturas económicas, el fichaje de David Silva por el Manchester City ha dejado claras evidencias de la falta de lucidez negociadora de Real Madrid y FC Barcelona.
El caso del conjunto blanco es especialmente sangrante, ya que al tiempo que se concretaba la venta del canario por entre 30 y 35 M€, los merengues se hacían con los servicios de Ángel di María, por el que se pagarán 25 M€ más otro 11 en función de distintas variables .
Para el Barça, por su parte, esta operación implica una doble oportunidad perdida. Primero, porque el de Arguineguín era una de las opciones que contemplaba Pep Guardiola para mejorar las prestaciones de la medular y, segundo, porque su salida trabará notablemente otra negociación que tenía en marcha, la de Juan Manuel Mata.
Y es que, según relata el diario Sport, el Valencia, tras hacer caja con los traspasos de David Villa, Nikola Zigic y el citado Silva, ya no se plantea la venta del atacante y se agarra a su cláusula de rescisión (60 M€).