Arrastra Javi Martínez una fama realmente injusta. En casi todos los medios se le califica de mediocentro combativo y físico, como si el toque, la profundidad o la visión de juego no formaran parte de su elenco de cualidades.
Pero el navarro, para los que se han molestado en seguirle más allá de dos partidos, representa mucho más que eso. Aprovecha a la perfección todas las bondades que le ofrece su poderoso físico, pero también muestra un desparpajo y un manejo de balón al que difícilmente llegan otros jugadores de su perfil.
Consciente de su enorme potencial, el FC Barcelona acaba de señalarle como uno de los posibles recambios de Yayá Touré, jugador que parece predestinado a firmar por el Manchester City.
Sin embargo, la oferta que prepararan los azulgranas, de unos 12 M€, ni siquiera alcanza la mitad de su cláusula de rescisión (30 M€), por lo que el Athletic de Bilbao aún puede respirar tranquilo.