Pep y Sandro buscan un trueque por Ibra

Rosell prefirió jugar al despiste en sus apariciones televisivas y echó balones fuera cuando se le preguntó por el capítulo de altas y bajas en el transcurso de su primera reunión con Guardiola. El presidente electo negó haber hablado de posibles entradas y salidas, de la situación del mercado internacional y de los ajustes necesarios de cara a la próxima temporada. Pero no fue así. Por supuesto que Sandro y Pep hablaron de las necesidades del técnico y de sus deseos a la hora de mover el vestuario en el mercado veraniego. El técnico fue claro y conciso en su exposición y el nuevo mandatario azulgrana no sólo asimiló la información sino que además, a las primeras de cambio, ya expuso sus hipotéticas soluciones.

El tema más espinoso fue el de Zlatan Ibrahimovic. Guardiola repitió el discurso que ha mantenido desde el final de temporada. El de Santpedor vería con muy buenos ojos que el sueco abandonara la disciplina del Barça, aunque también entiende las dificultades que entraña su salida y, en el caso de que no prosperaran las negociaciones, haría todo lo posible para reconducir el papel del goleador. Rosell está perfectamente al corriente de los deseos de Guardiola y de los movimientos que la actual secretaría técnica ha realizado en el mercado durante las últimas semanas. Sabe las necesidades del club y durante la cita con el entrenador ya le expuso tres posibles alternativas.

La salida de Ibrahimovic, según el criterio de Rosell, pasaría por gestionar un trueque con el Liverpool, Manchester City o Milan. Los grandes equipos van muy cortos de efectivo y es casi imposible que alguien contemple una operación en base a poner 50 millones de euros sobre la mesa. Pero el trueque es diferente y abre un reducido grupo de opciones factibles de negociar.

El Liverpool y Fernando Torres están en primera línea. No es un secreto que el delantero español quiere abandonar el club inglés y que Sandro Rosell ya intentó su contratación en el 2003. Lleva meses en boca de todos, pero hasta ahora Pep todavía no se ha pronunciado al respecto.

La segunda alternativa es la de Robinho. El Barça la ha estudiado en las últimas semanas y, de la mano de Sandro, se podría activar con mucha más facilidad. El City estaría encantado con Ibra, el nuevo presidente abriría las puertas del delantero brasileño y sólo falta saber si tiene el visto bueno del técnico.

Por último está el caso del Milan. Hace semanas adelantamos que Silvio Berlusconi sueña con un golpe de efecto llamado Zlatan Ibrahimovic. Sin embargo, las arcas milanesas están vacías y no cubren las expectativas del Barça. Ahí entraría en juego la opción de Pato. El joven delantero está en progresión y en la última temporada ha sufrido algún que otro problema. Se ha quedado fuera del Mundial y estaría por la labor de dar el salto al fútbol español.

Sandro Rosell prometió empezar a trabajar ya y mantener informado en todo momento al técnico sobre el desarrollo de las operaciones.