El Manchester United anunció el fichaje del internacional mexicano Javier Hernández, jugador del Chivas de Guadalajara, que se incorporará a la disciplina del equipo de Alex Ferguson cuando reciba el permiso de trabajo en el Reino Unido. Y todo un día después de caer frente al Bayern de Munich en los cuartos de final de la Liga de Campeones.
Se trata por tanto de una operación relámpago para tratar de ocultar el fracaso deportivo en Europa y en la que el Manchester ha tenido que echar el resto ya que, a pesar de que informó oficialmente que el fichaje se había hecho por una cantidad «no especificada», lo cierto es que ha pagado doce millones de euros. Una cifra muy superior a la de mercado, de ahí que haya descabalgado de la operación a clubes como el propio Valencia, —y a otros equipos que competían por el jugador— porque hacía un tiempo estaba realizando un seguimiento al futbolista, pero que nada puede hacer ante el poderío económico de los de Manchester que fichan a golpe de talonario dado que son uno de los clubes más poderosos del mundo.
Javier Hernández, —de apodo ´Chicharito´ debido a su padre el Chicharo Hernández, futbolista que participó en el Mundial de México 86—, es un delantero joven y con mucha proyección, que se distingue por su enorme potencia, velocidad y su habilidad para definir en cualquier situación. Tiene una enorme capacidad para el remate y se mueve por todo el frente del ataque. Se trata de la gran esperanza del fútbol mexicano para el futuro.