El entrenador del Nápoles quiere hacerse con los servicios de José Sosa, que ya no tiene lugar en el Bayern Múnich. De hecho, el conjunto alemán está buscando un club para dejarle ir, más alla que de haber jugado en la reciente final de la Copa de Alemania, donde su equipo logró obtener el título y ha tenido una buena actuación.
Para que el Principito pueda emigrar del Bayern, el Nápoles tendrá que mejorar la oferta realizada medio millón de euros más de lo ofrecido anteriormente, aunque el agente del jugador está "haciendo fuezas" y hablando con los dueños de la ficha para que acepten los dos millones de euros ofertados, teniendo en cuenta que en junio de 2011 al jugador se le termina el contrato y podrá irse donde se le venga en ganas.
El jugador es un deseo del entrenador del Nápoles, quién sabe que el centrocampista creativo le puede brindar mucho juego y llegar a asociarse de muy buena forma con la figura del equipo, su compatriota Ezequiel Lavezzi. Pero ahora el Parma también quiere al argentino. Habrá que ver qué sucede.