La renovación del capitán Rafael Sastre y el fichaje del hasta ahora cedido Alberto Botía son los deberes que tiene la secretaría técnica del Sporting de Gijón para esta semana, última de trabajo de la presente temporada para la primera plantilla rojiblanca.
El Sporting le ofreció la renovación por una temporada a Sastre y éste la ha aceptado, con lo que cumplirá una década defendiendo la camiseta rojiblanca, si bien por el momento la firma del nuevo contrato no se ha producido. También existe un principio de acuerdo entre el Sporting, el Barcelona y el central Alberto Botía para que éste firme por cuatro temporadas por el equipo gijonés, en el que estuvo cedido esta temporada.
Queda pendiente que el club catalán y el asturiano acaben de ponerse de acuerdo en las cantidades que los azulgranas deberían abonar para recuperar al prometedor central, que se irán incrementando a medida que transcurren las temporadas de contrato.
Con estas dos operaciones prácticamente cerradas la secretaría técnica que encabeza Emilio de Dios trabaja en la contratación de un centrocampista, incorporación en la que el Sporting va a hacer el mayor esfuerzo económico para la próxima temporada. El club gijonés ya ha fichado a dos delanteros, Gastón Sangoy y Nacho Novo, y a un hombre polivalente pero especialmente jugador de banda como es el canario Ayoze, en los que no ha gastado mucho dinero ya que los dos últimos llegan con la carta de libertad.
Por su parte la plantilla sportinguista, ya sin varios de los futbolistas que acaban contrato, afronta la última semana de trabajo que como la pasada va a ser muy relajada y con algunas salidas fuera de la Escuela de Mareo como la prevista para mañana en la que los futbolistas harán el descenso del río Sella en piragua.