Como el Séptimo de Caballería en el momento más crítico, los Boston Celtics están sometiendo a sus más feroces rivales de la Conferencia Este: a toque de carga.
Tras humillar a Cleveland y poner a LeBron James mirando lejos de Ohio, los Celtics golpean de nuevo: ganan su segundo partido seguido en el Amway Arena de Orlando y dominan por 2-0 la final del Este. En plenos playoffs ante Cavs y Magic, los Celtics han ganado sus cinco últimos partidos: dos en Orlando, otro en Cleveland y otros dos en Boston, adonde vuelven ahora con este 2-0.
Defensa.
Manda la defensa disciplinada de Boston, implacable en los ajustes: en la Liga regular 2009-10, Orlando, 59 victorias (segunda mejor marca) tiraba 78 veces por partido, con media de 102,8 puntos.
Como pasó a los Cavs de LeBron, el duro control de los Celtics maniata a los Magic de Howard, que tiran menos (74 veces por partido) y promedian 90 puntos en estas dos derrotas de Orlando: casi 13 puntos menos que en la Liga. Tras el desastre del primer día, Howard reaccionó (30 puntos), pero Carter se detuvo en 16 puntos y dos vitales tiros libres fallados al final. Nada frena a Paul Pierce (28 puntos) ni a las torres celtics: todos a Boston.
Los Lakers, en la polémica latina
Ayer de madrugada, Lakers y Suns jugaron el segundo partido de la final del Oeste (1-0, Lakers), con polémica sobre la ley de inmigración de Arizona. Vanessa Bryant, esposa de Kobe, lleva este rótulo en la camiseta: "¿Parezco yo ilegal?". Phil Jackson se niega a rectificar sus palabras de apoyo a la ley.