Cualquiera que sea la decisión respecto a su futuro profesional, ésta no se plasmará por escrito hasta pasado el 10 de mayo. No es una fecha caprichosa. Villa y su todavía representante formal, José Luis Tamargo -el contacto entre ambos es nulo desde principio de temporada-, finalizan su relación profesional la próxima semana y el futbolista quiere evitar cualquier conflicto de intereses que pueda acabar en los tribunales.
A Villa no se le escapan estos detalles. El asturiano no quiere cabos sueltos y hace sólo unos días notificó por escrito a José Luis Tamargo que el contrato que une a ambas partes queda extinguido el próximo 10 de mayo. El texto también recoge de forma explícita la voluntad del jugador por finiquitar la relación laboral.
A efectos prácticos, Villa y su entorno llevan meses contactando con diversos agentes que han transmitido todo tipo de propuestas. Es cuestión de esperar unos días más y afrontar el 11 de mayo libre de ataduras para concretar su deseo de futuro.