David Villa no quería enfrentarse a Costa de Marfil, Francia o Portugal en la fase de grupos del Mundial, y su deseo fue concedido: Honduras, Chile y Suiza van a ser los primeros rivales. Lo que no advirtió el Guaje fue el cruce que les espera en la eliminatoria de octavos de final, un adversario que saldrá del denominado ´grupo de la muerte´ compuesto por Brasil, Portugal, Costa de Marfil y Corea del Norte como perita en dulce. Rápidamente se cogió una libreta para ir haciendo supuestos y con el sorteo, el gran sueño de los internacionales que entrena Del Bosque y de gran parte de los aficionados es posible: la final del Mundial contra Brasil. La única condición que deben reunir las dos selecciones, más allá de ir superando eliminatorias, es ocupar la misma posición en la fase de grupos. ¿Temor? Ninguno. Tras ganar la Eurocopa, la selección ha pasado de tener miedo a darlo, de ahí que vayan a Sudáfrica con la etiqueta de favoritos. En el anterior Mundial celebrado en Alemania, la Roja ganó sus tres partidos en la primera fase pero en el primer cruce —contra Francia— regresaron a casa, allí se aprendió bien la lección, por lo que la tropa valencianista presente en la selección va a ir a Sudáfrica a pelear por todo con la humildad que siempre les ha caracterizado. La bola con el nombre de España fue la última de su bombo en aparecer, ahora quieren ser los últimos en regresar de África, porque Villa está dispuestos a que sea el Mundial de la Roja.
«No es un grupo fácil, pero viendo los rivales que nos podían tocar en la primera fase, es para estar contentos. Eso sí, debemos tener bien claro que nadie nos va a dar facilidades», aseguró el goleador de Tuilla nada más confeccionarse el cuadro final, que vivió con cierta tensión dos momentos del sorteo, cuando sólo quedaban por salir del bombo tres las bolas de Costa de Marfil o Chile para medirse a España, igual como en el último, cuando la suerte les sonrió al salir Portugal unos instantes antes que Suiza. Las dos potencias que se evitaron a las primeras de cambio pueden ser los rivales de la Roja en el primer cruce, que ya forma parte de todas las tertulias de bar: «Ya se habla de ese cruce con el grupo de la muerte, pero un Mundial es difícil de por sí. Puedes tener suerte o cierta ventaja en la fase de grupos, pero después en los cruces todos los rivales tienen mucha calidad, pero tampoco creo que los demás tuvieran muchas ganas de enfrentarse a nosotros». Antes habrá que superar a Chile, Honduras y Suiza, con el equipo chileno como principal dificultad. No hay que pasar muchas páginas de la historia para recordar el último compromiso de la Roja contra Chile, disputado hace un año en Vila-real y con triunfo local por 3-0. «Son un grupo muy aguerrido que no nos concedió muchas ocasiones de gol, aunque al final ganamos», recordó el punta de Tuilla, que frente a los chilenos igualó a los míticos Zarra y Kubala, hasta la fecha los únicos en marcar en cinco partidos consecutivos con la selección, récord que pulverizó el valencianista al dejarlo en seis comparecencias seguidas. De Honduras y Suiza, David prefirió hablar más adelante cuando cuente con mayor información, ya que no son dos potencias. ¿Favoritos con la Roja? «Si nos califican así es porque se están haciendo bien las cosas, pero eso no es ninguna ventaja. Luego se va a ver todo en las eliminatorias, favorito será el que gane, ir con ese cartel no te ayuda nada».
Camino de hacer historia
Al ariete de Tuilla empiezan a colocarle entre los favoritos para acabar el torneo como máximo goleador, una situación que a él no le incomoda, aunque no pone reparo en compartir ese galardón con el ´Niño´: «Es importante ser uno de los favoritos para acabar como máximo goleador, ojalá seamos Fernando Torres y yo los primeros, eso significaría que habríamos hecho un buen año». En la última Eurocopa, el ´Niño´ marcó el gol de la final contra Alemania —Villa estaba lesionado— pero el ´7´ valencianista se llevó la Bota de Oro con sus cinco goles. David es la principal referencia en el ataque de la Roja, con una efectividad demoledora (0,65 goles por partido) y está a nueve goles de convertirse en el máximo goleador de la selección en toda su historia. ¿Lo será tras el Mundial? Sería buena señal para él y para la Roja valencianista.