Alexandre Vinokourov logró una impresionante victoria en la Clásica Lieja-Bastogne-Lieja y completó su semana más grande tras ganar el viernes el Giro del Trentino. El kazajo fue el más fuerte en la línea de meta por delante de Kolobnev y del español Alejandro Valverde, que finalmente fue tercero.
Vinkourov ha vuelto y lo ha hecho más fuerte que nunca pese a sus 36 primaveras. Desde que en agosto del año pasado regresara al pelotón después de dos años de sanción por dopaje, el kazajo ha vuelto por sus fueros para demostrar a todos que su calidad sobre la bicicleta es indiscutible.
Después de ganar la contrarreloj y la general final del Giro del Trentino, Vinokourvo viajaba a la 'Decana' del ciclismo para intentar jugar sus bazas. La empresa no era nada fácil puesto que a lado tenía a un grupo de favoritos muy notorio. Pero el corredor del Astana no se arrugó en ningún momento y su descaro y su fuerza hicieron que alzara los brazos en Lieja.
Después de la escapada del día, formada por Alan Pérez, Veikkanen, Devenyns, Terpstra, De Gendt, Bouet y Bellemakers, la verdadera Clásica comenzó a falta de 20 kilómetros para el final cuando Andy Schleck, vencedor del año pasado, lanzaba un ataque que únicamente era contestado por Gilbert, enorme hoy.
La carrera pasaba por la penúltima cota del día, la de Roche aux Faucons, y Contador mostró sus credenciales lanzando un duro ataque en el pelotón que le hizo conectar con Schleck y Gilbert. Pero en el descenso de la misma cota se unían a ellos Evans, Vinokourov, Antón y 'Purito'.
La 'Armada' española volvió a demotrar su potencial con tres corredores entre los diez primeros
Es ahí donde Vinokourov puso las cartas sobre la mesa y lanzó un órdago a todos que sólo fue visto por Kolobnev. Ambos corredores lograban abrir una importante brecha a falta de la última cota del día, la de San Nicolás. Gilbert intentó darles caza, pero no tuvo éxito.
El belga, que corría junto a Valverde y Evans, atacó en esa última cota para intentar conectar con la cabeza de carrera, pero fue inútil. El entendimiento entre Vinokourov y Kolobnev estaba siendo muy buena y la venta iba en ascenso. Es por eso que la victoria se la disputarían entre ambos.
El kazajo aprovechó el último repecho de la carrera para asestar un duro ataque a su compañero de fuga, que no pudo hacer otra cosa que verle marchar. El corredor del Astana se impuso así en una Clásica que ya ganó en 2005. Por detrás llegaba Kolobnev, que volvió a demostrar que su segundo puesto en el pasado Mundial de Mendrisio no fue casualidad, y tercero Valverde, que celebró su cumpleaños superando al sprint a Gilbert y a Evans.
Posteriormente llegaba el resto de favoritos a sólo 3 segundos con Andy Schleck a la cabeza seguido de un sensacional Igor Antón. Alberto Contador, que viajaba a Lieja con el fin de seguir con su preparación y coger experiencie en este tipo de carreras, terminó décimo en la última prueba del 'Tríptico de las Ardenas'.