Debate en el Gran Circo

Sólo se ha disputado una carrera del Mundial de Fórmula 1 y la promesa vendida por la FIA de que esta temporada sería más espectacular con las nuevas reglas ya ha fracasado. Y no porque el público, mayoritariamente en internet, haya lanzado las primeras críticas por los escasos adelantamientos en el GP de Bahrein —que sí lo han hecho— si no porque han sido los propios protagonistas del Gran Circo, escuderías y pilotos, los que ya han solicitado cambios en el reglamento para que no se vuelva a repetir una procesión de monoplazas como la que se vivió en Sakhir. Si bien la FIA, Bernie Ecclestone y Ferrari —que hizo doblete— exigen paciencia para ver cómo transcurren las próximas carreras, los directores de los equipos perdedores —MercedesGP o McLaren— y algunos pilotos como Michael Schumacher o Mark Webber ya han levantado la voz por el aburrimiento sufrido el pasado fin de semana, especialmente por la prohibición esta campaña de suministrar gasolina durante la carrera, que disminuye la entrada en boxes.

«Es la salida y luego sólo es ir a tu ritmo y no cometer errores. Adelantar es prácticamente imposible, salvo si alguien comete un error. Esto es lo que nos espera con este tipo de estrategia de carrera» manifestó el Káiser a la BBC tras la carrera. Junto al heptacampeón del mundo también se ha unido a la causa el piloto australiano de Red Bull: «No auguro nada bueno para ninguna de las carreras del calendario con una parada en boxes», dijo Webber. Pero el que se ha despachado a gusto ha sido el ex piloto de F1, David Coulthard, que culpa a la herencia dejada por Max Mosley. El ahora comentarista de TV explica que el problema es más complejo y viejo, y asegura que los aficionados deberían recordar «el límite de revoluciones a dieciocho mil, la estandarización de los motores y las cajas de cambios, y el único suministrador de neumáticos», todo ello medidas tomadas por el ex presidente de la FIA. «Parece que han hecho muy poco para mejorar el espectáculo si Bahrein es el camino a seguir» defiende el escocés, que irónicamente exclama en el diario Telegraph: «Espero que Mosley, dentro de su torre de marfil tras abandonar su cargo, disfrutara del Gran Premio de Bahrein»

Junto a los pilotos, la FOTA ya se ha reunido para buscar soluciones, que pasarían por obligar a realizar dos paradas en boxes, una propuesta nacida del presidente de la Asociación de equipos de F1 y directivo de McLaren, Martin Whitmarsh, y del director ejecutivo de Mercedes-GP, Nick Fry, pero que ya ha tenido su respuesta por parte del patrón de la Fórmula 1. «Que no cunda el pánico, no hay crisis en la F1. Traté de explicarles de qué trata nuestro negocio: se trata de pilotar y de entretener al público, no de jugar con los ordenadores e ir rápido a una vuelta», admitió Ecclestone en el periódico The Times, a la vez que sentenció: «El problema es que realmente no se puede contar con los equipos. Ellos no deben escribir las reglas».