Los Lakers frenaron una racha de tres derrotas consecutivas y, aunque sufrieron más de lo previsto, vencieron a los Raptors por 109-107 con 32 puntos y una canasta final decisiva de su gran estrella, Kobe Bryant.
Kobe recibió un balón de Pau Gasol (17 puntos, nueve rebotes) para anotar una suspensión casi sobre la bocina que dio el partido a los suyos.
Por los Raptors destacaron Chris Bosh, con 22 tantos y siete rebotes, y el italiano Andrea Bargnani, con 21 puntos y ocho rebotes. José Manuel Calderón firmó 10 puntos y cinco asistencias en 24 minutos.
Toronto venció a los Lakers el 24 de enero por 106-105. Los angelinos no pierden cuatro partidos consecutivos desde abril de 2007.
Los locales arrancaron el partido tan fríos (2-
como la noche angelina, aunque Bryant quiso despejar rápido los fantasmas y se echó el equipo a la espalda en su faceta de líder. Administró bien el balón y alimentó a Gasol y a Andrew Bynum, que firmaron 12 de los 18 primeros puntos de los Lakers.
Con el marcador 18-18 entró desde el banquillo José Manuel Calderón para los Raptors, hasta entonces bien plantados en la pista y con una destacada actuación del espectacular y saltarín DeMar DeRozan.
La presencia del base Calderón liderando la segunda unidad de los canadienses evitó que los californianos tomaran las riendas del partido, y aunque los de Phil Jackson apretaban en cuanto a ritmo y defensa, la explosiva conexión italiana formada por Bargnani y Marco Belinelli puso sobre aviso a su rival al descanso (50-58).
Bargnani, apoyado en la gran tarea del banquillo de los Raptors, se iba a los 15 puntos por entonces. Toronto anotó siete de 10 en triples en la primera parte.
Con el susto en el cuerpo, los Lakers comenzaron a labrar la remontada. Bynum emergió como figura en el tercer periodo, mientras Bryant y Gasol aportaban el aliento necesario para levantar el partido (67-69), aunque un triple de Jarrett Jack parecía complicar la situación (71-77).
Los de Jackson debían comenzar el esfuerzo de nuevo y así se lo plantearon desde el comienzo del último cuarto, cuando apretaron el acelerador y se dejaron llevar por rugir del Staples Center con 85-86 en el marcador. Entonces apareció Lamar Odom y puso por delante a los suyos con una decidida penetración.
Restaban más de nueve minutos. Un mundo aún. Y los Raptors volvieron a recuperar el mando del encuentro con Calderón en pista.
Bryant volvió a igualar las cosas a falta de 5:53 (96-96) y encorajinó a los suyos para elevar la intensidad hasta el final.
Gasol, sin jugar en el último cuarto, regresó a pista a falta de algo más de dos minutos, pero no pudo evitar que Bosh anotara un triple para dejar en tablas el partido (107-107) a falta de nueve segundos.
Suficientes para Bryant, que una vez más, dejó su firma para resolver el partido.