El mercado de pilotos vive pendiente del anuncio oficial del fichaje de Fernando Alonso por Ferrari. Su llegada desencadenará otros movimientos. Los más directos son los de Raikkonen a McLaren (aunque sigue sin cerrarse su contratación a la espera del finiquito rojo y tiene otras novias como Brawn, si no retuviera a Button, o Toyota) y Robert Kubica, que será el sustituto del asturiano en Renault. El polaco llegará en 2010 con el alivio de poder ser al fin el número uno de una escudería, pero aún no sabe si podrá contar con el hombre que le ha contratado, Flavio Briatore. A su lado se espera a Grosjean, pero podría darse alguna carambola de última hora.
La otra perla del mercado es Nico Rosberg, que tiene un acuerdo para correr con Brawn-Mercedes el año próximo, a la espera de la entrada mayoritaria de la marca de la estrella en el accionariado en 2011. El problema de Button y Barrichello, los principales aspirantes al título, es que el equipo de Ross les paga por debajo de su caché. Es bastante probable que Rubinho abandone el equipo y opte por una retirada dorada en otra escudería. Tiene varias ofertas.