El Sporting de Gijón continúa trabajando para planificar la próxima temporada, y para ello los directivos asturianos ya ha decidido el futuro de dos futbolistas que se encontraban a prueba con el filial rojiblanco. El primero de ellos es Matías Sosa, mediapunta argentino que llegaba procedente de Estudiantes de la Plata y que no seguirá finalmente en Mareo.
El otro jugador es Andrei Florian, un extremo rumano que militó anteriormente en las categorías inferiores del Brescia y que finalmente sí continuará en el cuadro de El Molinón. Se trata de un extremo muy rápido y hábil de 18 años que en principio jugará con el segundo equipo durante su período de adaptación.