El guerracivilismo sigue instalado en Francia tras el Mundial y Domenech no tiene intención de apaciguarlo. El ex técnico de los bleus ha tomado la determinación de pedir daños y perjuicios a la Federación Francesa por contratar a Laurent Blanc para su puesto cuando su contrato aún no ha vencido. Según lo firmado en 2004, Domenech está vinculado a la dirección técnica del equipo galo y a la función de instructor de entrenadores de la FFF hasta el 31 de este mes, por lo que, sorprendentemente, en estos momentos Francia tiene dos seleccionadores para un único banquillo.
Este hecho de menosprecio hacia el polémico entrenador está valorado, según su abogado, en dos millones de euros y eso ha servido para escandalizar aún más a un país que no lo quiere ver ni en pintura. Domenech tiene unas ganancias de 12.000 euros al mes como instructor de entrenadores a los que había que sumar 45.000 más cuando era seleccionador. Estas cantidades ya habían indignado al pueblo francés, que ahora ve cómo, ni corto ni perezoso, en vez de irse exige una indemnización.
Por eso se espera con especial atención el consejo federal de la FFF que se celebrará el próximo viernes. En él se tendrá que ver qué hacer con un seleccionador vetado por todos los franceses, pero avalado por un contrato que le respalda.
La FFF: "¡Hay que echarlo ya!"
Guy Chambilly, miembro de la junta directiva de la FFF, fue tajante en Le Parisien a la hora de valorar la situación de Domenech: "Tenía que estar fuera. Hay que echarlo ya. Se pedirá su despido en la sesión del viernes del consejo federal y yo lo apoyo. ¿Instructor de entrenadores? ¡Por favor! Este hombre no puede dar cursos sobre cómo dirigir a un equipo. Está claro".