Hilo oficial Grecia

Todo sobre los griegos en referencia al Mundial 2010

Grecia, con la misma receta que en 2004

La selección de Grecia, clasificada para el Mundial de Sudáfrica de 2010 tras superar en la repesca a Ucrania, buscará en su segundo periplo mundialista recuperar las sensaciones que le llevaron a la cima en el Europeo de Portugal de 2004, con un conjunto milimétrico en aptitud al de entonces.

El bloque griego, que actualmente ocupa el duodécimo puesto en la clasificación FIFA, vuelve a encomendarse a su gran mentor, el alemán Otto Rehhagel, para comandar a un buque que dejó de ser de segunda fila tras sorprender al mundo en la cita continental del 2004, el único éxito de renombre de un fútbol aún modesto.

Grecia apenas cuenta con presencias reseñables en las Copas del Mundo y llevaba 16 años sin estar en una. En los Estados Unidos, los griegos se marcharon del torneo, donde compartieron también grupo con Argentina y Nigeria, sin estrenar sus casilleros de puntos ni de goles. Su futuro en Sudáfrica pasará principalmente por sus dos primeros partidos, ante Corea del Sur y las 'Super Águilas', ya que cierra ante la 'albiceleste'.

Gol en griego se escribe con 'G' de Gekas


Theofanis Gekas es la gran figura del ataque helénico y una de las esperanzas del equipo de Rehhagel para lograr otro 'milagro' como el de la Eurocopa 2004. El próximo atacante del Eintracht Frankfurt marcó diez tantos en la fase clasificatoria para ser el líder europeo.

Sin embargo, a pesar de esta cifra, Gekas se mantiene humilde y señala que lo importante es el trabajo de equipo. "Fue algo excelente, por supuesto, pero para nosotros es irrelevante quien marca los goles" comentaba en una entrevista a la página oficial de la FIFA.

"Trabajamos muy bien en equipo durante toda la eliminatoria y quiero agradecer a mis compañeros por darme la oportunidad de anotar estos goles". manifestaba Gekas.

'Fanis' como se le conoce en Grecia, tuvo una complicada temporada este año en la Bundesliga donde su equipo el Herta de Berlin no pudo evitar el descenso. Sin embargo, llega a Sudáfrica concentrado exclusivamente en su selección y con la esperanza de hacer un buen papel.

Los helénicos enfrentarán a Nigeria, Corea del Sur y la favorita Argentina en el grupo B. "Son rivales complicados, con Argentina como favorito, pero no es imposible pasar a la siguiente ronda". Aunque, Gekas decidió no hacer predicciones "llegar a Sudáfrica es todo un éxito para nosotros. Ahora tenemos que esperar y ver que pasa".

Makos y Tzavelas se caen de la lista de Rehhagel


El alemán Otto Rehhagel, técnico de la selección de Grecia, ha ofrecido la lista de 23 jugadores que participarán en el Mundial de Sudáfrica 2010, de la que se han quedado fuera el medio Grigoris Makos y el defensa Giorgos Tzavelas, ambos del AEK Atenas.

Rehhagel, que tras ofrecer una relación con 30 futbolistas ya había reducido la lista a 25, se decantó finalmente por prescindir de ambos para el torneo mundialista, en el que el cuadro heleno se enfrentará en el grupo B a Argentina, Corea del Sur y Nigeria.

Convocados:
- Porteros: Michalis Sifakis (Aris Salónica), Alexandros Tzorvas (Panathinaikos) y Kostas Chalkias (PAOK Salónica).

- Defensas: Giorgos Seitaridis, Loukas Vintra, Nikos Spiropoulos (Panathinaikos), Evangelos Moras (Bolonia/ITA), Socrates Papastathopoulos (Génova/ITA), Sotiris Kyrgiakos (Liverpool/ING), Avraam Papadopoulos, Vasilis Torosidis (Olympiacos) y Stelios Malezas (PAOK Salónica).

- Medios: Kostas Katsouranis, Giorgos Karagounis (Panathinaikos), Alexandros Tziolis (Siena/ITA), Sotiris Ninis (Panathinaikos), Christos Patsatzoglou (Omonia/CYP) y Sakis Prittas (Aris Salónica).

- Delanteros: Angelos Charisteas (Núremberg/GER), Dimitris Salpigidis (Panathinaikos), Pantelis Kapetanos (Steaua Bucarest/RUM), Theofanis Gekas (Hertha Berlín/GER) y Giorgos Samaras (Celtic/ESC).

Grecia: el Mundial que merecía Rehhagel


Cuando Grecia abandonó la Euro 2008 sin haber sumado ni un solo punto y habiendo marcado un único gol, parecía que el glorioso ciclo comandado por Otto Rehhagel había llegado a su fin. Que estaba caduco, que se había creído tanto la caricatura que se hacía desde el exterior sobre sí mismo que había exagerado los rasgos más primitivos de su fútbol. Sin embargo, al Rey le quedaba crédito. Siguió al frente del combinado nacional heleno y, contra todo pronóstico, lo clasificó para Sudáfrica 2010. Visto con perspectiva, es un premio que sí merecía vivir el veterano estratega alemán.

Y es que lo de Austria y Suiza fue esperpéntico. Lo que más se recuerda de Grecia en aquel campeonato es una jugada en la que dos de sus centrales se van pasando el balón en línea horizontal, una vez tras otra, incapaces de encontrar a un compañero desmarcado en la zona medular. Claro, es que no había. Siempre he pensado que a los helenos les contaron tantas veces que habían ganado en Portugal por su fortaleza defensiva y su fútbol directo que decidieron potenciar aún más estas características. Y acabaron abandonando los conceptos que habían sido más decisivos en ese verano mágico que culminó en Lisboa. No olvidemos que el que fue considerado mejor futbolista de aquel torneo no fue ni un central, ni el portero, ni un delantero rematador. Fue Theo Zagorakis, el jugador de mayor calidad de su centro del campo, el que, juntándose con Basinas y Katsouranis, lograba que el equipo pudiera salir a jugar con criterio. No era un conjunto ese de largas posesiones, pero sí sabía qué hacer con la pelota. En cambio, en las versiones más recientes del cuadro de King Otto, sólo hemos asistido a un esquema 5-2-3 que defiende por acumulación y que también espera encontrar el camino del gol gracias a la presencia de un buen puñado de atacantes en el campo contrario. Se olvida por completo de la elaboración, pese a que Katsouranis y Karagounis, sus dos buenos medios centros, serían perfectamente capaces de jugar. Por todo ello, hace dos años el proyecto parecía agotado.

Pero aprovechando su buen coeficiente en el sorteo previo, el campeón de Europa de 2004 cayó en un grupo asequible, uno de los más flojos de la zona europea. Quedó en segundo lugar por detrás de Suiza y ligeramente por encima de Israel, correspondiéndole luego un cruce ante Ucrania en los play-off. Mi impresión, y así titulé el artículo previo sobre aquella eliminatoria, era que íbamos a asistir a los últimos días del mito Rehhagel como seleccionador nacional heleno. El combinado ex soviético representaba todo lo opuesto a lo que nos inspiraba Grecia: era un equipo pujante, recién coronado campeón de Europa sub-19, estaba promocionando a chicos jóvenes para que llegaran a su gran año de 2012 como un bloque maduro y competitivo. En un partido de ida disputado en un estadio OAKA que ni consiguió llenarse -la imagen era desoladora, y nos daba un poco la razón sobre el desencanto que se vivía en Atenas y el resto de ciudades del país-, el 0-0 parecía confirmar ese favoritismo amarillo. Pero un gol de Salpingidis en la vuelta obraba el milagro y conseguía que Rehhagel, aunque con una trascendencia menor, volviera a hacer historia. Y es que Grecia se clasificaba por segunda vez por un Mundial. En el anterior, el de 1994, no sumó ni un solo punto. A poco que le vaya bien, éste será el mejor campeonato global de todos los tiempos para la selección helena, una medalla más para el currículum glorioso de un técnico que, por haber logrado en 2004 una de las mayores heroicidades del fútbol moderno, merecía una despedida como ésta.

¿A qué Grecia veremos? ¿Tiene opciones de llegar lejos? A priori pocas, aunque es cierto que el segundo puesto en el grupo es atacable. En los últimos amistosos -en los que el equipo ha dejado una imagen muy pobre-, King Otto ha probado un sistema más parecido al 4-3-3, renunciando a un central y apostando por otro centrocampista, dibujando un esquema más parecido al que triunfó en Portugal. Le gustan los defensores altos y fuertes, agresivos, muy competentes en el juego aéreo -Kyrgiakos, del Liverpool, es un buen ejemplo de ello-, y si finalmente acaba formando con Seitaridis y Spyropoulos, contaría de nuevo con dos carrileros con capacidad para incorporarse al ataque, un rasgo también muy presente en el equipo de 2004. Lo que es innegociable es lo de los tres puntas. Está casi cantado que el tridente lo van a formar Charisteas, el ídolo de Lisboa, muy venido a menos ya; Salpingidis, que este año ha bajado mucho sus registros goleadores pero ha ejercido de escudero notable de Djibril Cissé en el Panathinaikos campeón de liga, y Samaras, el mejor delantero de la actualidad en el país. Muchas voces le reclaman al técnico que le dé una oportunidad a Sotiris Ninis en tres cuartos de campo. El prodigio veinteañero, descubierto en su día por el español Víctor Muñoz, es el jugador más creativo que ha aparecido en el fútbol griego desde Vassili Tsartas. El único que, en un momento de inspiración, podría desbloquear un encuentro a partir del talento. Sin embargo, hace seis años el ex jugador sevillista era utilizado sólo como recambio de emergencia, como cambio para solucionar los contratiempos inesperados. Parece que al pequeño crack de origen albanés le tienen reservado el mismo papel: el de apagafuegos en el Mundial que supondrá el broche de oro a la carrera de Rehhagel.

1 Kostas Chalkias Portero 22 Stelios Malezas Defensa
12 Alexandros Tzorvas Portero 6 Alexandros Tziolis Centrocampista
13 Michalis Sifakis Portero 10 Giorgos Karagounis Centrocampista
2 Giourkas Seitaridis Defensa 18 Sotiris Ninis Centrocampista
3 Christos Patsatzoglou Defensa 21 Kostas Katsouranis Centrocampista
4 Nikos Spiropoulos Defensa 23 Sakis Prittas Centrocampista
5 Vangelis Moras Defensa 7 Georgios Samaras Delantero
8 Avraam Papadopoulos Defensa 9 Angelos Charisteas Delantero
11 Loukas Vyntra Defensa 14 Dimitris Salpingidis Delantero
15 Vasilis Torosidis Defensa 17 Theofanis Gekas Delantero
16 Sotiris Kyrgiakos Defensa 20 Pantelis Kapetanos Delantero
19 Sokratis Papastathopoulos Defensa - Otto Rehhagel Entrenador

Grecia vive nostálgicamente aferrado aún a la gloria de la Eurocopa de 2004 y sin capacidad para el recambio generacional. Otto Rehhagel presenta en este Mundial un grupo de veteranos de guerra que dieron malas sensaciones. Se ha pasado el arroz para los Seitaridis, Karagounis, Charisteas, Kyrgiakos y compañía, todos con la treintena ya superada, en su última cita mundialista y con la carrera ya terminada. Poco, o nada, ofreció Grecia a pesar de un arreón final más bienintencionado que dañino (Gekas a punto estuvo de recortar la diferencia con un peligroso disparo), ante un rival siempre mejor.

Grecia: Alexandros Tzorvas; Alexandros Tziolis, Avraam Papadopoulos, Giorgos Karagounis, Loukas Vyntra, Dimitris Salpingidis, Vassilis Torosidis, Sotirios Kyrgiakos, Fanis Gekas (Sotiris Ninis, m.79), Sokratis Papastathopoulos (Georgios Samaras, m.37), Costas Katsouranis.

Nigeria: Vincent Enyeama, Joseph Yobo, Taye Taiwo (Uwa Echiejile, m.55 -Rabio Afolabi, m.77-), Danny Shittu, Yakubu Ayegbeni, Peter Odemwingie (Chinedu Obasi, m.46), Kalu Uche, Sani Kaita, Lukman Haruna, Chidi Odiah, Dickson Etuhu.

Goles: 0-1, m.16: Kalu Uche. 1-1m n.44: Salpingidis. 2-1, m.71: Torosidis.

Árbitro: Oscar Ruiz (Colombia). Roja directa a Sani Kaita en el m.33 por una patada a Karagounis. Tarjetas amarillas a Sokratis, Tziolis y Samaras, por parte de Grecia, y a Obasi, de Nigeria.

Incidencias. Partido del grupo B, disputado en el estadio Free State de Bloemfontein ante unos 30.000 espectadores.

Grecia no estaba muerta

Grecia no se despide el Mundial como así parecía tras el primer partido frente a Corea. Los griegos no estaban muertos y este resultado (2-1) frente a Nigeria es como un soplo de aire fresco para la selección helena. Además, ya existe un hombre que entra en el Olimpo griego al anotar el primer gol de su selección en un Mundial, Dimitrios Salpingidis.

da igual creo que muy alla no va a llegar es una alegria el ganar un partido en el mundial pero de verdad si pasa no creo que supere el cruce


saludos