Rubén Pinar ha cortado la única oreja de la primera corrida de toros de El Pilar de Zaragoza. El albaceteño paseó el trofeo del sexto toro de La Campana después de una faena de toreo listo y un planteamiento inteligente ante un animal que ha tenido nobleza. Con la mano derecha, el torero lo ha sabido llevar a su velocidad sin someterlo ni obligarlo para que durase lo suficiente y luciendo su buena condición. La segunda parte de su actuación se desarrolló en las cercanías con pases circulares citando por la espalda. Remató su labor de una buena estocada y, con todo ello, se ha ganado su comparecencia en la corrida del día 14 de octubre donde sustituirá a El Cid.
El resto del festejo se ha encontrado marcado por la falta de raza de la corrida de La Campana, un encierro muy bien presentado y noble pero al que ha faltado fuerza y duración. El quinto fue devuelto y sustituído por un toro de Abilio Hernández, un cinqueño feo y de nulo juego. Con este material, Juan Baustista ha estado a un buen nivel con un ejemplar manso y rajado y otro - su primero- que protestó las embestidas rebrincándose.
Matías Tejela, por su parte, sacó algún muletazo limpio y de buen trazo al que hizo segundo y no pudo hacer nada con el sobrero. Pinar lo había intentado ya con el tercero de la tarde, un animal que apuntó calidad en el capote pero que se apagó en la muleta.