Tarde para el recuerdo en Logroño

Segunda de feria y tres cuartos de entrada en los tendidos se han corrido seis toros de la ganadería de El Pilar, cuatro toros desorejables, un cuarto deslucido y un quinto de bronca y distraída embestida. Destacó entre todos el segundo. Ovacionados en el arrastre 1º, 2º, 3º y 6º. Los diestros actuantes Morante de la Puebla oreja y pitos, Diego Urdiales saludos desde el tercio en ambos y El Cid oreja y oreja.

1ºLIGANTE, castaño, claro y bociblanco de 517 kilos.
Tibio saludo capotero del de La Puebla que sólo mostró un poco de entusiasmo tras el quite que el arnedano le asestó por verónicas templadas. De Morante destacar una verónica y la media de remate muy sentidas. Comenzó su faena doblándose sin llegar al tendido. Diferente fue la segunda tanda con tres muletazos ligados y templados. Detalles de una faena con altibajos y enganchones que bajó de nivel por la izquierda y no pudimos ver desplegado todo el arte del sevillano. Faena a un sosete y noble del Pilar en la que Morante nunca estuvo confiado. Espadazo mediocre a un toro que murió en

2º MEDILONILLO, colorao de 525 kilos.
Buen saludo capotero a un toro que fue a más tras mimarlo en la lidia. Se estiró a la verónica con lances de gusto del riojano. Destacó con dos pares arriesgados “El Víctor” que se desmonteró tras el tercio a un toro que se vino arriba en banderillas.
Empezó su faena doblándose y mandando sobre el toro y una vez en los medios lo toreó por el derecho con muletazos templados y cadentes arrastrando la muleta por los suelos. Por el izquierdo no terminó de cuajar a un gran toro. Cuajó otra gran tanda por la derecha con lances ligados, enroscándose al toro hasta “agobiarlo”.Vimos la mejor versión de Urdiales en La Ribera. Buena estocada del riojano que tras un aviso y cinco descabellos perdió las orejas del toro quedándose el premio en un saludo desde el tercio. Y el toro ovacionado en el arrastre.

3º RENACUAJERO, negro de 542 kilos.
Se lo sacó con soltura a los medios. Tras una suerte de varas en querencia tuvo un comienzo prometedor con un toro que se arrancaba en la distancia larga y aunque un poco flojo de remos cogía la muleta con codicia metiendo la cara. Al natural lo toreó El Cid bajándole la franela, ligando los pases y rematando con uno bueno de pecho. Profundos naturales del relajado torero de Salteras. Volvió la buena zurda de El Cid que tras los adornos de rigor pasaportó al burel de un estoca entera y un poco trasera. Oreja y ovación para el toro.

4º SOSPECHOSO, colorao de 551 kilos.
Salió desganado desde el principio Morante y es lo que tienen los artista que te dan una de cal y una de arena. Lo pasaportó de cuatro pinchazos y una estocada caída, descabelló recibiendo pitos.

5º DUDETO, colorao de 599 kilos.
Diego no se llega a acoplar con el capote y tras desmontar a Manuel Burgos en el segundo tercio comenzó una faena sin lucimiento en la que Diego se jugó el tipo ante un tor bronco y trotón que sabía lo que se dejaba atrás. El público no percibió el peligro sordo que atesoraba aunque en algunos pasajes de la faena se oyeron los ¡ayy! De algún susto que le dio. Toro probón, incierto y de rara embestida. Recibió un aviso antes de entrar a matar y mató al toro tras un pinchazo, una estocada y dos descabellos sonando el segundo aviso. Pitos para el toro y Urdiales saludó desde el tercio.

6º POTRINERO, colorao y bragado de 598 kilos.
Toro abanto de salida al que El Cid al recibirlo le recetó tres verónicas y una media de ensueño. Puso al toro en suerte por delantales templados. Morante realizó el quite del perdón por chicuelinas de una suavidad infinita rematando con una media verónica de regusto. Replicó El Cid con dos verónicas y una media a cámara lenta. Una buena lidia por parte de El Boni y saludaron montera en mano tras dos grandes pares de banderillas de El Alcalareño y David Saugar “Pirri” tras hacer un quite para impedir que el toro fuera picado en el que hacía puerta. En el centro del ruedo y sobre una moneda de cinco duros comenzó El Cid la faena por derechazos ligados y relajados. Ligó sus pases por naturales pero basó su faena por el mejor pitón del toro, el derecho realizando una faena más mandona que la primera. Estocada hasta la bola, descabello y oreja. El toro aplaudido en el arrastre.